.
Desde este valle lejano de la vida,
escribo estas líneas hacia el cielo
mientras miro el gemir de tantos
y su llanto.
No es que gemir quisiera en amargura,
pues muy bien yo sé que es el camino
que nos lleva por senderos tan claros a la Vida.
Marcadas huellas del Maestro Bueno
me guian a la Gloria,
en tanto que en silencio espero
junto a la oración de amor esperanzada.
Y al preguntar por qué quedan
los ojos de los hombres en el polvo;
por qué no dejan que el espíritu hable?
Sufriremos contigo cada día
pensando en el hermano,
en el enfermo triste y en el solo.
Gracias, Señor, por ser Amigo,
gracias
Desde este valle lejano de la vida,
escribo estas líneas hacia el cielo
mientras miro el gemir de tantos
y su llanto.
No es que gemir quisiera en amargura,
pues muy bien yo sé que es el camino
que nos lleva por senderos tan claros a la Vida.
Marcadas huellas del Maestro Bueno
me guian a la Gloria,
en tanto que en silencio espero
junto a la oración de amor esperanzada.
Y al preguntar por qué quedan
los ojos de los hombres en el polvo;
por qué no dejan que el espíritu hable?
Sufriremos contigo cada día
pensando en el hermano,
en el enfermo triste y en el solo.
Gracias, Señor, por ser Amigo,
gracias