sábado, abril 29, 2006
Por las calles
sábado, abril 22, 2006
Nubes
martes, abril 18, 2006
Desde el monte
sábado, abril 15, 2006
Pascua.
Pascua noche Santa
viernes, abril 14, 2006
ME ENCONTRE CON EL AMIGO
ME ENCONTRE CON EL AMIGO
Hay un algo en mi alma que enloquece
es un Amor que va creciendo y va conmigo.
¡Ah, ya sé es del Amigo!
Sin odiosos olvidos, sin ausencias,
así es su amistad y no termina.
Nunca, nunca lo vi yo en mi camino
como lo vieron ayer esos amigos:
Pedro, Santiago y Juan, esos amigos.
Sin embargo muy dentro, voz divina
sentí con ardor cómo me amaba.
Me recosté en su pecho
y al escuchar sus cosas,
quedé embelesado y en ternura
¡Oh, dicha más pura!
Ya no quise más y El me decía:
Toma mi paz y no estés solo.
Llenó mi corazón y en sus latidos
sólo le dije: Jesús, Persona Amada,
cómo llega tu cariño
y en mi locura repetí lo dicho:
"Aunque no hubiera cielo yo te amara..."
¡Gracias. Amigo, gracias!
sábado, abril 08, 2006
Madre...
jueves, abril 06, 2006
Parabola de la ovejita perdida
"Yo soy el buen pastor, y conozco mis ovejas, y las mías me conocen”
(Juan 10,14)
Parábola de la oveja perdida (Mt. 18.10-14)
15:1 Se acercaban a Jesús todos los publicanos y pecadores para oírle, 15:2 y los fariseos y los escribas murmuraban, diciendo: Este a los pecadores recibe, y con ellos come. 15:3 Entonces él les refirió esta parábola, diciendo: 15:4 ¿Qué hombre de vosotros, teniendo cien ovejas, si pierde una de ellas, no deja las noventa y nueve en el desierto, y va tras la que se perdió, hasta encontrarla? 15:5 Y cuando la encuentra, la pone sobre sus hombros gozoso; 15:6 y al llegar a casa, reúne a sus amigos y vecinos, diciéndoles: Gozaos conmigo, porque he encontrado mi oveja que se había perdido. 15:7 Os digo que así habrá más gozo en el cielo por un pecador que se arrepiente, que por noventa y nueve justos que no necesitan de arrepentimiento.
lunes, abril 03, 2006
Vida...
¡Cómo cuesta, Señor, el esperar la Vida!
Nos fuimos desprendiendo de las cosas,
de aquella esclavitud mala y dañina
para fijar los ojos en la Vida.
Tú la ganaste, Tu nos la diste, Jesús,
Tú eres la Vida!
Cambiaste nuestro rumbo y el querer humano
haciéndonos sentir el gozo pleno,
¡ese tu gozo, Señor, oh paz de cielo!
Mi alma se escapa hacia el Amor divino,
ese es mi destino lo pienso con fuerza agradecido.
y agradecido elevo una oración en gozo, enamorada.
Renovada la tierra, cielo claro, grito de esperanza buena.
¡Oh, Vida, Jesús Resucitado, la humanidad te canta!
Inacabable voz en su Aleluya.
Flores y luz y el firmamento
ya no pueden callar y dicen ¡Aleluia!.
¡Oh, Victoria de Amor enardecido buscarte quiero!
Llévame cuando quieras, Jesús mío,
para estar junto a Ti gozando de esa paz perfecta y clara. ¡Gracias!
(Agal )
domingo, abril 02, 2006
Jesus
Se lo conoce tan poco
y es por eso que el mundo anda de tumbo en tumbo,
sin norte, sin un buen rumbo, sin alegría fuerte y clara.
Es el Maestro del amor quien inspira toda palabra,
todo sentimiento, toda poesía.
Cuando con El se está brota y brota el amor
y el canto en una melodía celestial, divina.
El es como Fuente inagotable de agua fresca,
de esa agua que corre por asequias con su arrullo
y en silencio habla de vida que se desliza suave y cantarina.
El Señor es la Pascua tan florida
y llamada a cambiar el mundo con su historia.
La Pascua es campanas que resuenan
y rompen el silencio pregonando
la Resurrección del Vencedor de la muerte
y toda muerte para decir:
Yo vivo, mi presencia es Vida.
Síganme los amigos ,
no se queden en el tiempo egoísta y frío,
síganme para que vivan.
"Si conocieran el don de Dios".
Pero la historia comenzó con una Pasión
y una cruz donde Cristo
con sus brazos extendidos
quiso abrazar a la humanidad toda,
a esa misma humanidad que dijo:
¡Muera! ¡
Cómo no quererte, Jesús mío,
generoso Amor no comprendido!
Vivir la Semana Santa es vivir como santos
contagiados por ese gesto de entrega
de un Dios Vivo.
Tú, Jesús
aclamado en el Domingo de Ramos
y después un: ¡Crucifícale!.
¡Oh, mundo, mundo,
qué mal respondes a un amor tan grande!
Pero ahora vives y por nosotros vives,
Amor sin medida. ¡Gracias!